Slaid Cleaves. Everything You Love Will Be Taken Away
Voy a hablar del autor de uno de mis diez discos favoritos de todos los tiempos. El insuperable álbum de versiones de amiguetes Unsung. Estáis avisados. Y lo hago por si queréis poner en cuarentena mis palabras cuando diga que este es uno de los mejores discos de este año, tanto en el ámbito del rock americano como en general, o cuando diga que Slaid Cleaves tiene una de las mejores voces de la historia de la música de raíces ¿Que exagero? Quizá. De hecho es uno de mis defectos pero en algo debían notarse mis raíces andaluzas. Me da igual. Lo afirmo y me reafirmo. Y en vuestras manos está creerme o no. Slaid Cleaves es un genio. Y este disco es una maravilla. De principio a fin. Hace unos meses leía las líneas que mi amigo Andreu Cunill le dedicaba en estas páginas al nuevo trabajo de Costello. Pues bien, cogéis su reseña, la multiplicáis por….diez, y ya tenéis la mía sobre el nuevo disco de Cleaves. Hermoso, irrepetible, espectacular. Porque si el bendito Chriss Isaak es un rocker con alma de crooner, Slaid es un countrysinger también con alma de crooner. Elegante y austero. Sobrio pero con arrestos de leyenda. Lo triste es que pasará desapercibido. Como todos sus discos. Sin pena ni gloria. Aunque como decía hablando de él el escritor de bestsellers Stephen King, “la vida es peor sin Slaid Cleaves en ella”. Se que si ya no lo estás tampoco va a convencerte que te diga que la producción de Gurf Morlix es soberbia o que revistas como Mojo o Uncut le han dado las máximas puntuaciones a este disco ¿Qué le vamos a hacer? Yo lo tengo claro. Voy a buscar uno de los baberos de mi hija. Lo necesito. Publicado en Ruta 66 nº263 (Septiembre)
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